A pesar del respiro que le ha dado a Obama el éxito de la operación contra Bin Laden, la política exterior de su administración continúa ausente del escenario mundial. El estancamiento de la situación en Libia, la apatía ante la represión en Siria, la inexistencia de un plan activo de apoyo a la democracia en los países del norte de África para evitar que su primavera se convierta en un otoño anticipado o la falta de respuesta fáctica, más allá de algunas declaraciones, al acuerdo entre la Autoridad Palestina y Hamás, así lo atestiguan. Obama continúa al margen, atenazado por sus fantasmas.
Pero lo más preocupante no es la parálisis sino la incapacidad que parece existir para superarla. Cuando la administración Obama, ante un éxito indudable como es la muerte de Bin Laden, manifiesta más dudas, contradicciones e incertidumbres que unidad, coherencia y convicción, es que algo falla en el epicentro de sus concepciones políticas. Un epicentro vacío, que no va mucho más allá de hacer lo contrario de Bush.
Obama quisiera exhibir la muerte de Bin Laden como un éxito personal, pero le molesta que en gran parte sea también el éxito de la política que él siempre ha criticado (derrocamiento de Saddam Hussein, Guantánamo ...). El problema para Obama es que su crítica a Bush era una crítica ciega, "ad hominem", una crítica a la totalidad, y ahora no puede aceptar nada que se desprenda de ella sin entrar en contradicción.
Resulta curioso observar como ante la reivindicación que hacen sectores republicanos de la eficiencia de las llamadas "técnicas de interrogatorio mejoradas" la respuesta de la administración demócrata sea tan confusa. El mismo jefe de la CIA, León Panetta, ha aceptado implícitamente que estas técnicas sirvieron también para localizar Bin Laden pero se niega a decirlo explícitamente. Ustedes creen que si supieran realmente que estas técnicas "mejoradas" no han tenido nada que ver con la captura del jefe de Al Qaeda no lo habrían explotado?
Esto demuestra la desorientación y falta de solidez del titular de la Casa Blanca y su equipo. Porque si hay un punto realmente inaceptable en toda la política de Bush contra el terrorismo es precisamente éste: que las "técnicas de interrogatorio mejoradas" hayan sido un simple eufemismo de tortura, aunque ésta haya sido aplicada de una manera limitada y selectiva (unos treinta de los miles de detenidos)
Se puede reconocer la eficiencia de los métodos de interrogatorio y no estar de acuerdo con ellos. Entonces, ¿por qué tanta ambigüedad? ¿O es que los demócratas dudan del principio "el fin no justifica los medios" cuando los medios son efectivos? ¿O es, quizá, que no tienen claro si las "técnicas de interrogatorio mejoradas" eran algo més que un maltrato o algo menos que una tortura? ¿O es, tal vez, que esta ambigüedad les sirve de coartada para justificar su decisión de volver a los "asesinatos selectivos"?
El "submarino", no; pero matar, sí. Obama continúa atrapado por sus fantasmas.
Adiós a Nihil Obstat | Hola a The Catalán Analyst
Después de 13 años de escribir en este blog prácticamente sin interrupción, hoy lo doy por clausurado. Esto no quiere decir que me haya jubilado de la red, sino que he pasado el relevo a otro blog que sigue la misma línea de Nihil Obstat. Se trata del blog The Catalán Analyst y de la cuenta de Twitter del mismo nombre: @CatalanAnalyst . Os los recomiendo.
Muchas gracias a todos por haberme seguido con tanta fidelidad durante todos estos años.