"Al leer la historia de las naciones, nos encontramos con que, como los individuos, tienen sus caprichos y sus peculiaridades. Sus temporadas de entusiasmo y de temeridad, cuando no se preocupan de lo que hacen. Vemos a comunidades enteras que de repente fijan sus mentes en un objeto, y se vuelven locas en su búsqueda. Como millones de personas se convierten a la vez, impresionadas por una ilusión, y corren detrás de ella, hasta que su atención es atrapada por alguna nueva locura, más cautivadora que la primera. Vemos de pronto a una nación presa, desde las clases altas a las bajas, por el violento deseo de la gloria militar. Otra, enloquecer de repente por una obcecación religiosa. Y a ninguna recuperar sus sentidos hasta que se han derramado ríos de sangre y sembrado una cosecha de gemidos y lágrimas, que será recolectada por sus descendientes. (...) Los hombres, se ha dicho con acierto, piensan en manada y se vuelven locos en rebaño, mientras que sólo recuperan sus sentidos lentamente, y uno a uno".
Charles Mackay. 'Memoirs of extraordinary popular delusions and the madness of crowds' 1841Via Francesc Costa